Comenzando mi día a dormir,
apagando sus destellos de luz,
escondiendo sus brazos calurosos,
nos deja ese rey que nos abriga.
Todo se recoge poco apoco,
un silencio ensordecedor los acompaña,
dando paso a esa oscuridad,
la cual trae consigo su vida.
En ese transcurso, en esa transformación,
todos mis sentidos se agudizan,
van percibiendo el cambio,
y las sensaciones sentidas,
florecen en esa oscuridad ofrecida.
Y ahí esperan liberarse,
creciendo en tu interior,
recreándose para salir a esa noche venidera,
cómplice de todos esos sueños y secretos,
que callada recibe y acoge.
Kris
Imagen cedida por I.V.V.
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